Laminación

Las placas que se obtienen de la Fundición se procesan con laminadores en frío modificando su espesor hasta lograr el calibre requerido por el cliente. Durante este proceso de reducción de calibre el material sufre cambios en sus propiedades físicas adquiriendo una dureza que dificulta continuar el proceso; por lo tanto para continuar con el proceso de laminación, y dependiendo del calibre requerido, se hace necesario recocer una o más veces el material en hornos de atmósfera controlada a temperaturas preestablecidas. Cuando se consigue el calibre solicitado se procede a cortar el material en cortadoras circulares de alta precisión garantizando así un corte preciso, sin rebabas y acorde al requerimiento del cliente. Posteriormente los materiales se empacan para prevenir el deterioro en su transporte o almacenamiento. Durante el proceso de laminación a los materiales se les inspecciona: el ancho con pie de rey o flexómetro, el calibre con micrómetro, la dureza con durómetro o microdurómetro, y el tamaño de grano con microscopio metalográfico.  De esta manera Laminaco puede asegurar la calidad en su producto final ajustándose a los requerimientos de sus clientes.